En los Llanos de La Cañada este miércoles Syngenta y Agroponiente celebraban un evento con compradores de tomate, al igual que meses atrás se desarrollaba una jornada similar con agricultores. Con el objetivo de testar las necesidades del sector desde sus distintos eslabones la sesión describía algunas de las actuales demandas del mercado, como el sabor o las innovaciones en distintas especialidades.
“El mercado siempre te pide cosas nuevas, que le ofrezcas algo distinto”, expresaba entre el público uno de los compradores que a diario trabaja en las subastas.
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Colores, nuevos formatos y calibres están entre esas demandas de clientes finales que quieren ser sorprendidos por las innovaciones en origen. Ahí está el tomate rosa que desde hace unos años a esta parte ha experimentado un notable crecimiento en Almería. “Ahora se demanda el rosa GGG, en ese calibre hay poco”, comentaba otro de los compradores describiendo así un nicho de mercado.
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Otro ejemplo de nicho es el pera en rama, demandado por supermercados británicos y nórdicos, y escaso en su oferta. El problema, según los productores, está en que se suelta con facilidad, aspecto en el que la mejora genética debe redundar. “Se puede hacer el pera rama en un formato de cinco tomates, unos 500 gramos y los mercados lo piden y lo pagan, pero no hay suficientes variedades”, corroboraba Andrés Soler, uno de los representantes de Agroponiente en la jornada.
El tomate pera tuvo un especial protagonismo en este evento, no en vano es el tomate por excelencia en los meses de verano en España y su demanda es creciente. Según los compradores, su auge – en detrimento de otras tipologías como los tipo Daniela – “está en que tiene mejor comida, un par de brix por encima del suelto”.
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Novedades de Syngenta. Ibai y Tasmir
Precisamente Syngenta mostraba como novedad en esta jornada la variedad tomate Ibai, un pera de calibre para mercado nacional, que viaja bien y que es un todoterreno en cuanto a su adaptabilidad a plantaciones tanto tempranas como tardías. “Frutos homogéneos, muy firmes que no presentan acabados en punta ni cuello verde”, precisaba Inmaculada Hernández, técnico especialista en cultivo de tomate de Syngenta.
Ya en otro segmento, como el de rojo suelto, Syngenta presentaba otra importante novedad como tomate Tasmir, destacando como valor añadido su sabor, “por encima de otros de su segmento”, según Inmaculada Hernández, y su alto porcentaje de primeras categorías. Tasmir es un tomate de calibre G, de frutos de un rojo intenso y brillante, muy bien adaptado para recolectar en los meses de frío, “son frutos como tornillos, todos iguales, homogéneos y sin destrío”, añadía Hernández.
365 días con tomates
Por su parte, Iván Alonso, técnico de ventas de Syngenta en el Levante, enumeró ante los compradores de subasta un catálogo de 365 días con tomates para ensalada. Variedades como Patriarca, un tomate beef de cuello verde para ciclos cortos, aunque también puede hacerse a ciclo largo, con sabor, calibre GG y buena firmeza. En un ciclo corto de otoño las recolecciones de Patriarca van de octubre/noviembre hasta febrero/marzo; y en uno de primavera de mayo a julio.
Iván Alonso también describió otro cuello verde como tomate Sigfrid, más orientado al frío. No en vano las primeras frutas no se recogen hasta diciembre. Sigfrid destaca sobre todo por su sabor en calibres principalmente GG.
En asurcados Dumas, una variedad todoterreno que se adapta a distintas condiciones de cultivo y es muy productivo. En cuellos blancos el beef Brabante, tanto para pintón como para rojo en G-GG, y con sabor. Además está Bizantino, un tipo beef muy precoz que cuaja bien con calor. Permite tener fruta desde octubre hasta enero/febrero y rotar a un segundo cultivo.
Degustación de tomates
La jornada concluyó con una degustación de tomates de Syngenta. De hecho durante la mesa de debate el sabor centró parte del diálogo. “El consumo, tanto nacional como exterior, quiere sabor, pero también vida poscosecha. La tarea está en conjugar ambos”, señalaban compradores como Ginés.
Francisco López, uno de los vicepresidentes de Agroponiente, avaló la importancia del sabor, pero insistió en que hay que trabajar también por la rentabilidad del productor, conjugando ambos parámetros: “Variedades con sabor, pero que sean productivas, pensando en el agricultor”.
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Ana Rubio